Barroso propondrá buscar respuestas sostenibles a los retos mundiales en la cumbre del G8 en Italia

El Presidente Barroso representará por quinta vez a la Comisión en la cumbre del G8, que este año se celebra bajo presidencia italiana en L’Aquila (Italia). Los líderes del G8 centrarán especialmente su atención en la economía mundial, incluyendo el comercio, el cambio climático, África y el desarrollo, y la seguridad alimentaria.

Junto a los dirigentes de Suecia (como titular de la Presidencia del Consejo de la UE), los otros cuatro miembros del G8 de la Unión Europea (Francia, Alemania, Italia y Reino Unido), así como Estados Unidos, Rusia, Canadá, y Japón, el Presidente Barroso insistirá en articular una respuesta internacional coordinada a retos comunes relacionados con la crisis económica y financiera, el comercio, el cambio climático y la energía, África y el desarrollo, y la seguridad alimentaria.

Respecto al cambio climático, se esperan importantes discusiones tanto en el foro del G8 como en la reunión del Foro de las Principales Economías. El Presidente Barroso subrayará la importancia de la ciencia y de mantener una elevación de la temperatura de 2ºC, y abogará por la reafirmación del objetivo de lograr al menos una reducción del 50% de las emisiones globales antes de 2050.

Además, todos los países desarrollados deberán estar dispuestos a reducir las emisiones al menos en un 80% en el mismo período y a dar un anticipo sólido mediante reducciones intermedias considerables, con esfuerzos similares por parte de todos los países desarrollados. A su vez, esto fomentará la disposición de las principales economías emergentes a actuar para reducir colectivamente sus emisiones por debajo de lo habitual. También hará hincapié en las oportunidades económicas de adoptar una economía basada en bajas emisiones de carbono.

En cuanto a la situación de la economía mundial, el Presidente Barroso pedirá al G8 que lance un enérgico llamamiento a resistir las presiones proteccionistas en el ámbito de los intercambios comerciales y la inversión en tiempos de crisis económica. Dado el fuerte impacto social de la crisis actual, apelará a todos los gobiernos a que diseñen políticas sociales y de empleo que ayuden a proteger a las personas y empleos con vistas a promover la recuperación económica y establecer un marco global nuevo y equitativo. También insistirá en que la reunión de L'Aquila proporcione un nuevo impulso hacia la conclusión del Programa de Doha para el Desarrollo cuanto antes.

Finalmente, el Presidente Barroso resaltará la continua importancia de la seguridad alimentaria mundial, ámbito en el que la Comisión, desde la última reunión del G8, ha acordado y comenzado a aplicar el Mecanismo Alimentario de 1 000 millones EUR.
En términos de participación, la cumbre del G8 de este año reflejará la fuerte voluntad de los dirigentes del G8 de desarrollar el diálogo con sus socios mundiales y convertirlo en una parte integrante e importante de la cumbre, creando puentes hacia otros procesos en curso, especialmente las negociaciones climáticas de UN y la Cumbre sobre Cambio Climático que se celebrará en Copenhague en diciembre de 2009.