Un informe publicado por la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) muestra que durante el verano de 2012, el porcentaje de lugares que exceden el "umbral de alerta" fue el más bajo de la historia, lo que indica episodios de picos más cortos y las concentraciones de ozono máximas eran más bajas. Sin embargo, un nuevo informe publicado por la Organización Mundial de la Salud sugiere que la exposición al ozono puede ser más perjudicial de lo que se pensaba.

El informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) sobre los niveles de ozono a nivel del suelo en verano de 2012 muestra que la contaminación por ozono sigue rebasando los niveles objetivo en Europa, pero el número de casos de superación del umbral de alerta fue menor que en cualquier otro año desde que se iniciará el control en 1997. El informe también destaca que los niveles más bajos observados durante el verano del año pasado fueron en parte debidos a las condiciones meteorológicas. En septiembre de 2012, la AEMA también publicó un informe que mostraba que uno de cada tres ciudadanos europeos está expuesto a contaminantes atmosféricos nocivos.

El "umbral de alerta", una concentración promedio en una hora de ozono de 240 μg/m3, se superó en 25 ocasiones. Esto ocurría en sólo siete Estados miembros: Bélgica, Francia, Alemania, Grecia, Italia, Portugal y España. Durante el verano de 2012, el porcentaje de lugares que excedieron este "umbral de alerta" fue el más bajo de la historia.

La contaminación por ozono puede viajar grandes distancias, lo que significa que es a la vez un problema de calidad del aire local pero también es un problema mundial y transfronterizo. El contaminante puede causar problemas respiratorios y otras enfermedades graves, dañar asimismo los cultivos y el medio ambiente en general. Un nuevo informe publicado por la Organización Mundial de la Salud sugiere que la exposición al ozono puede ser más perjudicial de lo que se pensaba.