El impuesto a las transacciones financieras reduciría significativamente las contribuciones de los Estados miembros al presupuesto de la UE

Según la Comisión Europea, si se adopta como un nuevo recurso propio del presupuesto de la UE el impuesto a las transacciones financieras, se reducirían las contribuciones de los Estados miembros a de la RNB al presupuesto de la UE en un 50%. De acuerdo con las estimaciones presentadas por la Comisión Europea, las contribuciones de los Estados miembros se reduciría en 54 mil millones de euros en 2020.

La Comisión Europea ha publicado sus cifras de estimaciones sobre la propuesta de la Comisión para el impuesto a las transacciones financieras. Según la institución europea, si se aprueba la propuesta reducirá significativamente las contribuciones de los Estados miembros al presupuesto de la UE. En enero de 2012, una mayoría de eurodiputados ya se mostraba a favor de este nuevo impuesto. El Comisario de Programación Financiera y Presupuestos, Janusz Lewandowski destacó que gravar las transacciones de todas las instituciones financieras a tasas tan bajas como el 0,01% es lo más justo, porque el sector financiero no paga el IVA y ha recibido apoyo masivo de dinero de los contribuyentes.

La Comisión propone que dos tercios de los ingresos del impuesto a las transacciones financieras sea para el presupuesto de la UE, reduciendo así las contribuciones de los Estados miembros en los mismos importes en función de su RNB, con lo que el tercio restante queda retenido por los Estados miembros. Por lo tanto, cada euro recaudado con este impuesto beneficiará en última instancia a los Estados miembros, ya sea a través de la recaudación de ingresos directa o mediante una reducción de las contribuciones al presupuesto de la UE.

El impuesto a las transacciones financieras podría constituir una nueva fuente de ingresos que reduciría las contribuciones de los Estados miembros al presupuesto de la UE, dando a los gobiernos nacionales margen de maniobra y contribuyendo al esfuerzo de consolidación presupuestaria general en toda Europa. La Comisión destaca que, aunque ya existe algún tipo similar de impuesto de transacciones financieras en varios Estados miembros, la acción europea podría ser más eficaz y eficiente que la acción no coordinada por los Estados miembros, dado el nivel de actividad transfronteriza y la alta movilidad de las bases imponibles.