La reunión del Consejo de Asuntos Generales terminó con el acuerdo de recomendar la concesión del estatuto de país candidato a Serbia, tras su solicitud de adhesión a la UE. Por otro lado también aprobó sin debate, el fortalecimiento de las medidas contra el régimen de Bielorrusia. En respuesta a esta decisión, las autoridades de este país han pedido al jefe de la delegación europea que abandone Bielorrusia.

Tras la solicitud de Serbia para la adhesión a la UE y después de un examen de la candidatura, el Consejo ha recomendado la condición de otorgar el estatus de candidato a este país y espera que el Consejo Europeo de marzo confirme esta decisión. Los ministros han examinado y confirmado el progreso que Serbia ha realizado además de observar que continúa mostrando un compromiso creíble además de seguir adelante con la aplicación de los acuerdos alcanzados en el diálogo entre Belgrado y Pristina. También ha cooperado activamente para permitir que la misión EULEX y la KFOR ejecuten sus mandatos.

Por otro lado, el Consejo ha adoptado también el refuerzo de las medidas restrictivas contra el régimen bielorruso. Con esta decisión el Consejo añade 21 personas responsables de la represión de la sociedad civil y de la oposición democrática en Bielorrusia a la lista de personas con la prohibición de viajar a la UE y a las que congelarán los activos. Además los activos de tres empresas vinculadas al régimen permanecen congelados mientras que las exportaciones a Bielorrusia de armas y material para la represión interna quedan prohibidos. Al mismo tiempo que se producía esta decisión, las autoridades bielorrusas solicitaron al Jefe de la Delegación de la UE en Minsk y al Embajador de Polonia salir del país.

Asimismo los ministros adoptaron en el Consejo de Asuntos Generales un Reglamento que establece los requisitos técnicos para las transferencias de crédito y las transacciones de débito directo en euros. Su adopción se produce tras un acuerdo alcanzado con el Parlamento Europeo en primera lectura. El Reglamento constituye un elemento clave del Espacio Único de Pagos, un área única de pagos en euros, que establece los plazos para la migración desde los instrumentos nacionales de pago hasta los europeos.