Bruselas propone un mercado único europeo de las telecomunicaciones para 500 millones de consumidores

La Comisión ha adoptado varias propuestas destinadas a reformar las normas que regulan las telecomunicaciones en la UE. Con esta reforma Bruselas pretende que los ciudadanos puedan beneficiarse, independientemente de dónde vivan o de a dónde viajen en la Unión, de unos servicios de comunicaciones mejores y más baratos, tanto si usan teléfonos móviles, conexiones rápidas a Internet de banda ancha o televisión por cable.

Para lograrlo, la Comisión propone reforzar los derechos de los consumidores tales como el derecho a cambiar de operador de telecomunicaciones en un día o el derecho a una información transparente y comparable, así como promover la inversión en nuevas estructuras de comunicaciones, en particular haciendo más fiables y seguras las redes de comunicación, especialmente ante el peligro de los virus y otros ciberataques.

Igualmente, Bruselas pretende establecer condiciones igualitarias para lograr un acceso a la banda ancha para todos, a través de una mejor gestión del espectro radioeléctrico y haciendo que, en regiones en las que sea muy costoso instalar nuevas infraestructuras de fibra, se pongan radiofrecuencias a disposición de los servicios inalámbricos de banda ancha.

Por otra parte, se propone una mejor reglamentación de las telecomunicaciones a través de la liberalización de los mercados y la instauración de órganos de vigilancia más independientes que garanticen una reglamentación justa en beneficio de los consumidores.

En relación a estas propuestas el Presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, declaró que "las telecomunicaciones constituyen un ámbito en el que nuestro mercado único puede lograr resultados muy concretos en beneficio de cada ciudadano: más posibilidad de elección y precios más bajos, tanto si se trata de teléfonos móviles como de conexiones a Internet de banda ancha. Al mismo tiempo, un mercado de 500 millones de consumidores abre nuevas perspectivas a los operadores de telecomunicaciones, siempre que las instancias europeas colaboren para lograr una competencia efectiva y unas normas iguales para todos".

Para llevar a la práctica la reforma de manera rápida y efectiva, el Ejecutivo comunitario propone que se instituya una Autoridad Europea del Mercado de las Telecomunicaciones que asistirá a la Comisión y a las entidades reguladoras nacionales para garantizar que la normativa del mercado y la de los consumidores se apliquen de forma coherente, independiente y exenta de proteccionismo en los Veintisiete Estados miembros de la UE.

Para convertirse en leyes, las propuestas de la Comisión tienen ahora que ser aprobadas por el Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros de la UE.