El registro de sustancias químicas REACH entra en vigor y, con él, la Agencia ECHA
Paralelamente, la nueva Agencia europea de productos químicos (ECHA) comienza también sus actividades. La Agencia, que es responsable de la gestión de la puesta en práctica de las nuevas exigencias, lanzará un sitio en Internet que proporcionará información importante como documentos de orientación, servicios de asistencia y otras herramientas relativas a REACH.
Desde el 1 de junio la Agencia debe realizar un esfuerzo considerable para estar plenamente operativa en junio de 2008 cuando las empresas comiencen la oferta en línea de preinscripciones y de expedientes de inscripción. El Director ejecutivo provisional de la Agencia es Geert Dancet quien ha sido nombrado por la Comisión para dirigir al equipo encargado de la puesta en marcha de la Agencia.
En palabras del Comisario de Medio Ambiente, Stavros Dimas, "al entrar en vigor REACH, la UE se dota de la legislación química más progresista del mundo. El buen comienzo de la Agencia europea de productos químicos es a partir de ahora la etapa siguiente para asegurare que REACH funcionará en la práctica".
Se pretende que REACH registre, en un periodo de 11 años, unas 30.000 sustancias químicas actualmente en uso. Este proceso permitirá colmar las lagunas a nivel de información sobre sus peligros y definir las medidas apropiadas de gestión de los riesgos para garantizar la seguridad de su utilización. Corresponderá a la industria presentar los datos requeridos e identificar las medidas necesarias para la gestión de los riesgos.
La Agencia se encargará también de la evaluación de sustancias químicas que son sospechosas de presentar un riesgo para la salud o el medio ambiente, así como del sistema de autorización de sustancias extremadamente preocupantes, previsto por REACH.
El sistema de autorización REACH incitará firmemente a las empresas a sustituir las sustancias peligrosas por otras más seguras. Todas las solicitudes para su autorización deberán incluir un análisis de las sustancias alternativas y un plan de sustitución cuando existan tales sustancias. Asimismo, REACH permitirá prohibiciones totales o parciales de forma más rápida cuando se detecten riesgos inaceptables.
Además, algunas medidas están previstas para garantizar que la experimentación animal esté limitada al mínimo estricto y fomentar el recurso de métodos alternativos.