En concreto, las diez propuestas presentadas en el plan persiguen reducir las cargas administrativas que soportan algunas compañías, especialmente las del sector agrícola o de los transportes. El programa tiene como objetivo calcular el coste de las cargas administrativas en estos sectores clave y determinar las obligaciones de información que serán a continuación objeto de propuestas destinadas a suprimir las cargas inútiles.

Según el Vicepresidente de la Comisión Europea y encargado de Empresa e Industria, Günter Verheugen, "las empresas deberían poder consagrar su tiempo a la producción y a la innovación, en lugar de rellenar formularios o responder a obligaciones demasiado burocráticas, por eso proponemos lanzar una campaña inédita contra el papeleo y animamos a los Estados miembros a emprender iniciativas similares a nivel nacional".

El programa de acción es una respuesta inmediata a las conclusiones del Consejo europeo de junio de 2006 y al paquete de medidas sobre la mejora de la normativa de noviembre del mismo año. La reducción de un 25 por ciento del papeleo en el conjunto de la UE implicaría una subida del PIB de la Unión de 150 mil millones de euros. El programa incita igualmente a todos los Estados miembros a lanzar operaciones de la misma naturaleza a nivel nacional, dado que la mayor parte de las cargas administrativas se derivan aún de la legislación nacional.

Según el programa de la Comisión, la reducción de cargas administrativas pasa por hacer más sencillos los requisitos para obtener ayudas a la exportación en el sector agrícola y por recortar los datos que los recolectores y agricultores deben presentar para recibir subvenciones. Además, en este mismo sector se pretende reducir a una vez al año las estadísticas.

Por otra parte, en los transportes se pretende eliminar algunas obligaciones obsoletas de documentación que se exigen a las empresas del sector dentro de la UE e introducir registros electrónicos para el intercambio de datos. En cuanto al sector marítimo, Bruselas ha propuesto que se simplifiquen los procedimientos administrativos y las obligaciones de información. También se solicita la reducción de exigencias para algunos barcos de pesca.

Asimismo, para las pequeñas empresas, como carnicerías y panaderías locales, el programa busca que puedan abstenerse de algunos análisis en el área de la higiene de los alimentos

Este programa de acción no tiene por objeto afectar a los objetivos políticos. Traduce más bien la voluntad de racionalizar, modernizar y de reducir los medios utilizados para poner en práctica los mismos. La Comisión, en estrecha cooperación con los Estados miembros, analizará a fondo las obligaciones de información que son la causa del papeleo. Todas las obligaciones atribuirán una etiqueta de precios indicando el tiempo y la cantidad gastada por las empresas para satisfacerles, lo que permitirá reducir, entre otras cosas, las exigencias obsoletas y contradictorias.

El Ejecutivo comunitario pretende que las medidas propuestas en el programa puedan adoptarse en la próxima Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno, en primavera.