La Comisión trazará las líneas a seguir para la coexistencia de cultivos genéticos
El 24 de abril se celebrará una mesa redonda sobre esta coexistencia, donde las partes interesadas tendrán la oportunidad de expresar sus puntos de vista. Después, el Ejecutivo comunitario presentará unas directrices sobre cómo abordar el problema de la coexistencia.
Según señaló Bruselas en un comunicado, el cultivo de OMG autorizados en la UE también tendrá consecuencias en la producción agrícola. En concreto, plantea la cuestión de cómo gestionar la mezcla accidental de cultivos modificados genéticamente y cultivos no modificados genéticamente. La capacidad del sector agrícola de garantizar el principio de libre de elección de los consumidores depende de su capacidad para mantener sistemas de producción separados.
Uno de los ejemplos a los que hace referencia la Comisión en relación con la pérdida de renta debida a la mezcla accidental es el de los agricultores convencionales y ecológicos que tienen que vender su cosecha a un precio inferior a causa de la presencia accidental de organismos modificados genéticamente por encima del límite autorizado.
Medidas de gestión posibles
Entre las medidas de gestión agrícola posibles el Ejecutivo ha señalado varias, como la distancias de separación entre parcelas, las barreras para el polen, el control de las plantas accidentales o la rotación de cultivos y calendarios de plantación durante diversos períodos de floración. Además, Bruselas indicó la necesidad de poner en marcha medidas de vigilancia durante el cultivo, la cosecha, el almacenamiento, el transporte y la transformación.
Por otra parte, la Comisión consideró la posibilidad de que entre agricultores, o entre granjeros y la industria, se puedan alcanzar acuerdos a escala local de forma voluntaria para garantizar la ausencia de cultivos modificados genéticamente en áreas específicas.