La Ley de la Pequeña Empresa pasa su primer examen y plantea futuros retos en crecimiento e innovación
Entre 2008 y 2010, la Comisión y los Estados miembros de la UE han llevado a cabo una serie de acciones enmarcadas en el ámbito de la Ley de la Pequeña Empresa Europea o "Small Business Act" (SBA), con el objetivo de aligerar la carga administrativa, facilitar el acceso a financiación de las PYME y apoyar su entrada a nuevos mercados. Si la mayor parte de las iniciativas previstas en la SBA han sido ya lanzadas, la revisión sobre su aplicación que ha llevado a cabo la Comisión muestra que aún debe hacerse mucho más para ayudar a las PYME.
Tanto la Estrategia Europa 2020 como la economía europea dependen en gran medida de que las pequeñas y medianas empresas (PYME) desarrollen su potencial. Por ello, la iniciativa SBA en favor de las pequeñas empresas adoptada presentada por la Comisión en junio de 2008 constituye el primer marco estratégico exhaustivo para la UE y sus Estados miembros. Desde su puesta en marcha se han logrado considerables avances por medio de acciones para dar mayor fuerza a las PYME en varios ámbitos:
- Cien mil PYMES se han beneficiado de los instrumentos financieros del Programa Marco para la Innovación y la Competitividad y han creado más de cien mil empleos.
- La directiva sobre morosidad establece que las autoridades públicas deben pagar a sus proveedores en un plazo de treinta días, lo que mejora el flujo de caja de las empresas.
- En la mayoría de Estados miembros el tiempo y los costes para crear una empresa se han reducido considerablemente; para crear una sociedad limitada en la UE en 2007 se necesitaban, por término medio, doce días y 485 euros, frente a solo siete días y 399 euros en 2010.
- La simplificación de los procedimientos en línea y las oportunidades para presentar ofertas conjuntas han facilitado la participación de las PYME en la contratación pública.
- El nuevo Centro Europeo para las PYME en China ayuda a las pequeñas y medianas empresas a acceder a los mercados chinos.
Si bien el informe sobre la revisión de la Small Business Act muestra que todos los Estados miembros han reconocido la importancia de una aplicación rápida de la SBA, el enfoque adoptado y los resultados obtenidos varían considerablemente entre los diferentes Estados miembros. La revisión subraya que los Estados miembros deben incrementar sus esfuerzos para fomentar el espíritu emprendedor y las PYME para apoyar la iniciativa empresarial en difícil coyuntura económica actual.
Un nuevo impulso a la iniciativa SBA
La Comisión está decidida a continuar la estrategia de prioridad para las PYME. Con objeto de reflejar los últimos acontecimientos económicos, ajustar las prioridades a la Estrategia Europa 2020 y la mejorar de forma continua el entorno empresarial para las PYME, en la revisión se propone llevar a cabo acciones en varios ámbitos prioritarios:
- Mejor acceso a la financiación para la inversión y el crecimiento
- Legislación inteligente para que las PYME puedan concentrarse en sus actividades empresariales centrales
- Aprovechar al máximo el mercado único
- Ayudar a las PYME a afrontar los retos de la globalización y el cambio climático